Según datos de la Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias (Fegein), hace dos meses en Galicia estaban disponibles casi 8.000 bajos comerciales. Ahora, solo están disponibes 4.800 bajos, lo que supone un 40 % menos. 

Este desplome en la disponibilidad de los bajos comerciales es una consecuencia de la pandemia del COVID-19 que hizo que cualquier intento de montar un negocio se desvaneciese. El temor a impagos provocó que muchos propietarios saliesen del mercado de arrendamiento. 

Las provincias de Pontevedra y A Coruña son las que tienen más bajos disponibles para alquilar, 1.750 y 1.900 respectivamente, frente a los 2.400 y 2.800 que se alquilaban hace dos meses. Concordando con estos datos, las ciudades de A Coruña y Vigo concentran el mayor número de alquileres disponibles. 

 

Fuente | Faro de Vigo