Esta semana se publicaron los resultados de una encuesta anual del alquiler en Bruselas. En la misma, se confirmaron las previsiones de incremento de los precios del alquiler que, desde 2004, se encareció un 20 por ciento. Este incremento, que ya supone cerca de un 30 por ciento de los ingresos medios de los belgas, está funcionando de incentivo para los pisos compartidos. El 11 por ciento de las viviendas de alquiler son pisos compartidos que, a pesar de ser más caros, suponen un ahorro para los residentes por compartir gastos.

Fuente.- DHnet