Después de 14 años de oposición, el partido Laborista regresa al Gobierno del Reino Unido con una amplía mayoría en el parlamento británico. El líder del Partido Laborista Keir Starmer, promete levantar 1,5 millones de viviendas nuevas, con reformas en las leyes de planificación urbana, acabar con los desahucios de alquiler de personas vulnerables, la introducción de nuevas ayudas a los compradores de primera vivienda, o reducir la factura energética de los hogares, además de imponer más impuestos a la compra de viviendas por parte de no residentes, entre otras medidas relacionadas con la vivienda.

La medida estrella en materia de Vivienda de Starmer es la promesa de levantar 1,5 millones de viviendas nuevas durante su legislatura. Y para eso prometió un nuevo sistema de planificación urbana, con el que se pretende agilizar las expropiaciones y la posibilidad de reclamación de los propietarios. La mayor parte de estas nuevas viviendas irán destinadas a aumentar el parque residencial destinado a vivienda social y asequible, tanto en venta como en alquiler. Adicionalmente, revisarán el programa de derecho a compra de vivienda sociales con descuentos para los inquilinos.

Otra de las apuestas del ganador de las elecciones británicas es levantar viviendas más sostenibles, bien diseñadas y de alta calidad “creando lugares que aumenten la resiliencia climática y promuevan la recuperación de la naturaleza”. En relación a la sostenibilidad de las viviendas, prometieron además 6.600 millones de libras en uno programa de rehabilitación y mejora del aislamiento de 5 millones de viviendas, llamado ‘Warm Homes’, a través de subvenciones y préstamos con bajos intereses para instalar paneles solares, baterías y calefacción de bajas emisiones para reducir las facturas del hogar.

Además, ofrecerán nuevas ayudas para la compra de una primera vivienda, así como introducir un plan de garantía hipotecaria integral y permanente, para ayudar a los jóvenes compradores con costes hipotecarios más bajos, y, en materia de alquiler, eliminar los desahucios de personas vulnerables.

Por otro lado, el partido Laborista no prevé en el corto plazo una subida masiva de impuestos, para contentar a los empresarios y mercados, pero sí anunció más cargas impositivas a la compra de viviendas por parte de extranjeros no residentes, entre otras tasas aún por determinar.

Fuente.- Idealista