Debido a las medidas impuestas por el Gobierno del Reino Unido para frenar la propagación del COVID-19, muchos inquilinos sufrieron una bajada en sus ingresos o despidos. Las autoridades y organizaciones de consumidores estiman que en el país hay 4,5 millones de familias en alquiler lo que supone un 20 % del total. 

Una encuesta elaborada por la empresa Yougov, revela que el 26 % de las familias en régimen de alquiler teme no poder hacer frente a los pagos de alquiler en los próximos tres meses. La cifra se eleva hasta el 35 % en aquellos hogares con familias que tienen hijos. 

Por otra parte, un sondeo de la empresa Opinium revela que el 43 % de los arrendatarios, cuyo trabajo se vió afectado por el confinamiento, admite tener problemas para pagar el alquiler, la comida o las facturas. La cuarta parte de los consultados en este sondeo revela que abandonó voluntariamente la vivienda que ocupaba y se mudó con familiares o amigos para evitar los pagos. 

El Gobierno británico aprobó un paquete de ayudas económicas pero las organizaciones de consumidores e inquilinos consideran que es insuficiente. 

 

Fuente | La Voz de Galicia