Las inmobiliarias de la zona de Ferrol coinciden en que la demanda de casas con finca o jardín para alquilar durante el verano e incluso durante todo el año se multiplicó por cinco, y el problema es que no hay oferta suficiente. Debido al confinamiento impuesto por la crisis del COVID-19, la gente no quiere seguir viviendo en pisos por temor ante nuevos confinamientos. 

En la temporada de verano siempre escasearon las viviendas de alquiler, pero ahora son los propios residentes de los núcleos urbanos de Ferrol y Narón los que reclaman este tipo de viviendas. Las zonas de playas, como Ares, Chanteiro, Doniño, Covas y Valdoviño, son las más solicitadas pero ante la escasez de oferta los demandantes se conforman con cualquier sitio fuera de la ciudad. 

 

Fuente | La Voz de Galicia