Según los datos recogidos por el portal inmobiliario Idealista, la oferta de vivienda en venta no para de bajar, en concreto, en el último trimestre de 2023 se redujo en un 8% en términos interanuales. En el segundo trimestre de 2023 el decrecimiento fue del 4%, por lo tanto se duplicó de un trimestre al siguiente. De este modo, la oferta encadena cuatro años consecutivos de descensos. El primer trimestre de 2020 (-1%) y el segundo trimestre de 2021 (-3%) fueron los períodos con menor decrecimiento en este tiempo, mientras que el segundo trimestre de 2020, coincidiendo con la pandemia del coronavirus, el descenso fue mayor, un 12%. 

Para Idealista, la falta de viviendas tiene un factor clave, la escasez de producto de obra nueva, y como consecuencia, existe una mayor presión sobre los precios. Durante el noviembre pasado, las operaciones de venta bajaron un 15,1% con respeto al mismo mes del año anterior, acumulando diez meses de descensos consecutivos, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística. 

En las previsiones del Banco de España en el pasado mes de junio, se consideraba improbable un descenso en el precio de la vivienda la corto plazo, principalmente debido a la favorable situación patrimonial de los distintos agentes de este mercado, los altos costes de los materiales de construcción y la escasez de obra nueva. Según los cálculos de la Sociedad de Tasación, la proyección de creación de hogares para los próximos años es de 200.000 anuales, el doble de las viviendas que los promotores son capaces de producir en este momento.

Fuente.- La Razón