Según se extrae del informe elaborado por JLL en Europa hay 7 millones de puestos de trabajo en riesgo para las personas de entre 15 y 24 años, lo que supone el 41% de todo el empleo para este grupo de edad, lo que dificultará aún más el acceso de los jóvenes al mercado de la vivienda. Este impacto se notará de forma más marcada en el mercado de compra que en el de alquiler porque el tiempo medio que tarda un potencial comprador de una vivienda en ahorrar para la entrada es de 12,5 años.

En España más de la mitad de las personas de 25 a 29 años vive en casa de sus padres. La emancipación de los jóvenes se ha convertido ya en un problema social en nuestro país que se agravará todavía más con la crisis del Covid, ya que esta parte de la población será más vulnerable a la crisis económica, provocando que la población más joven tenga menos capacidad de ahorro.

Entre las posibles soluciones a este problema destacan las iniciativas público-privadas que ya se están llevando a cabo para la vivienda en alquiler en ciudades como Madrid o Barcelona.

Fonte | El Economista