Las previsiones económicas de Bruselas apuntan a una ralentización de la inflación en la eurozona, acompañado de una pérdida de ingresos, mientras el empleo se mantendrá "robusto", pese a ello, el endurecimiento de la política monetaria podría deteriorar los ingresos de las familias y empresas afectando a su demanda interna. El enfriamiento de la demanda de créditos afectará a los precios de la vivienda, con lo que se pronostica una "ligera caída". Además, a pesar de la incertidumbre de la situación actual, la economía de la Eurozona seguirá creciendo ligeramente.

La Comisión Europea dice que "se espera que los precios de la vivivenda en la Unión Europea caigan ligeramente en términos nominales este año, con variaciones persistentes entre países". Los precios de la vivienda no podrán sufrir una reducción todavía mayor debido a la falta de oferta en la mayoría de los países de la UE.

Los datos actuales muestran una ralentización de la inflación, que se preveé una inflación del 5,6% este año y del 2,9% en 2024 en la Eurozona. En cuanto al PIB de la eurozona, las previsiones muestran un incremento de un 0,8% este año y un 1,3% en 2024. En la Unión Europea el crecimiento será semejante, por debajo de las previsiones de primavera.

Fuente.- Idealista